ni su mirada dormita.
Unge en su cuerpo la arcilla
moldeando su deseo
-deseando ser moldeada-.
Reconoció una vez las manos de su artista
y en el viento sus palabras despeinaron su cabello.
Y ahora lo busca con ansiosa quietud
y hacen temblar su cuerpo recuerdos y anhelos,
con espejos y sombras, con silencio.
Y el sol riega su vientre desnudo de impureza
y el brillo de la luna refleja su marea.
No eres vasija de miedo,
es de barro y de sonrisa,
tu mirada,
y tu belleza.
VUVU
bonito (=
ResponderEliminar:)
ResponderEliminarmuy wena!
ResponderEliminarpd: me escribis algo asi y te violo richard :P
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